martes, 28 de febrero de 2023

15- VER LA META ANTES DE EMPRENDER EL CAMINO

 VER LA META ANTES DE EMPRENDER EL CAMINO

Manuel Tenjo Cogollo

Email: manueltenjo@yahoo.com

Desarrollar el poder de una visión hace que los grandes empresarios vean la meta antes de que ocurra. Eso sorprende, la fuerza que tiene una visión y los seguidores que avanzan tras aquellos líderes. Lo que sigue es desarrollar la actitud necesaria para fortalecer la decisión inicial y avanzar hacia la meta, pues muchas decisiones son tomadas con la emoción, así que es necesario mantenerla para mantener el entusiasmo inicial, hasta llegar al éxito que se desea alcanzar.

Jesús de Nazaret tuvo la experiencia de la visión en “un monte alto”, don se ve rodeado de gloria para superar las dificultades y los problemas del camino por el que sigue. Así que el Maestro tiene la visión de la gloria que le brindará la fuerza para superar la pasión y muerte a la que se verá sometido, como lo narra Mateo (17,1-9). Así que es necesario analizar los elementos de la visión y la manera de mantenerla.

En aquel tiempo, Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a su hermano Juan

y se los llevó aparte a una montaña alta.

Se transfiguró delante de ellos,

y su rostro resplandecía como el sol,

y sus vestidos se volvieron blancos como la luz.

Y se les aparecieron Moisés y Elías conversando con él.

Pedro, entonces, tomó la palabra

y dijo a Jesús:

«Señor, ¡qué bien se está aquí!

Si quieres, haré tres tiendas:

una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.» 

Todavía estaba hablando

cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra,

y una voz desde la nube decía:

«Éste es mi Hijo, el amado, mi predilecto. Escuchadlo.» 

Al oírlo, los discípulos cayeron de bruces, llenos de espanto.

Jesús se acercó y, tocándolos, les dijo:

«Levantaos, no temáis.» 

Al alzar los ojos, no vieron a nadie más que a Jesús, solo. 

Cuando bajaban de la montaña, Jesús les mandó:

«No contéis a nadie la visión hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los muertos.»

1. Ver la gloria antes de que ocurra

Un emprendedor como el Maestro Jesús ve la gloria de Dios en “un monte alto”, acompañado de Moisés como representante de la Ley judía y de Elías quien representa a los profetas de la antigua alianza, de manera que exista el convencimiento de que Dios siempre cumple sus promesas. El vestido “blanco como la luz”, muestra una relación de intimidad y transparencia con Dios, quien dirá: “éste es mi Hijo amado, en quien me complazco” (Mt 17,3.5). Jesús ve el cumplimiento de las promesas, la gloria y el respaldo de Dios y la fuerza de una vida que transfigura la divinidad, antes de que ocurra. Sin embargo, sabe que debe pasar por el sufrimiento y la muerte en la cruz. La meta exige sacrificios, la visión pide esfuerzos, el dinamismo interno conduce a alcanzar las metas y vivir el éxito final.

Para que tú alcances las metas y vivas el éxito, debes pasar por el esfuerzo, el trabajo y la perseverancia, sin embargo, visualizar la meta facilita y ánima para llegar al final. Tú tienes que ver la gloria antes de que ocurra, aunque algunos te consideren iluso o loco, porque muchos emprenden campañas y pocos las logran.

Un elemento clave consiste en mantener la misión, en medio del tiempo y de las dificultades, repasar la meta que se quiere vivir, para superar los inconvenientes del camino.

2. Asociarse con quienes impulsan

Jesús tiene tres acompañantes (Pedro, Santiago y Juan), que se quedan en la experiencia momentánea, quieren quedarse a vivir en el monte e instalarse, pues están con miedo de avanzar a las metas (Mt 17,1.4.7). No es la mejor asociación para avanzar hacia las metas, pues frenan los procesos y no se conectan con la visión del Maestro.

El otro equipo de acompañantes de Jesús está conformado por dos triunfadores: Moisés, quien vence al faraón, vence al mar de las Cañas y vence al desierto, tiene la disciplina para llevar al pueblo a la tierra prometida. Elías ha vencido la tentación de la idolatría, del poder y ha visto la acción de Dios para corregir el mal en la historia, además se ha vencido a sí mismo para pedir ayuda a personas de otra cultura y de otra experiencia superar los problemas y volver viendo la gloria divina. Tanto Elías como Moisés subieron al cielo y participan de la comunión con Dios. Quien se asocia con triunfadores, verán las metas antes de obtenerlas, subirán de nivel y alcanzarán el éxito visionado.

El otro socio es el Padre, quien desde la nube dice: “éste es mi hijo amado, en quien me complazco” (Mt 17,5). Es el socio que promete la gloria, pero no quita los problemas, pues estos forjan el carácter triunfador. El respaldo de alguien superior hace que el emprendedor se sienta apoyado. El esfuerzo muestra sus frutos, cuando el mentor apoya el proceso y el emprendedor se lanza a obedecer y ver grandes logros. Así que es muy importante saber con quién te asocias para avanzar.

3. Evitar quedarse en la zona de confort

Pedro y sus amigos proponen crear una zona de confort: bueno es estarnos aquí. Si quieres, haré aquí tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías” (Mt 17,4). Es la tentación de la comodidad en medio de los problemas, porque el dolor no es suficientemente fuerte. La tendencia es a permanecer en situaciones cómodas, ya sean positivas o negativas, justificándolas y defendiéndolas.

Jesús dice a sus discípulos: “levántense, no tengan miedo” (Mt 17,6), porque es necesario avanzar. La visión se ha interiorizado, todo vuelve a la normalidad, pero el emprendedor ha crecido interiormente para superarse, disciplinarse y organizarse hasta ver las metas cumplidas.

Como leí en algún lugar: “la gente positiva es la que cayó, se levantó, se sacudió, se curó los raspones, le sonrió a la vida y le dijo: voy de nuevo”.

Sigue adelante, supera obstáculos y ten la disciplina interior hasta alcanzar la gloria del éxito y la alegría que brota de un ser luchador.

 

 

 

miércoles, 22 de febrero de 2023

14- TENTADOS A ABANDONAR LA MISIÓN

 TENTADOS A ABANDONAR LA MISIÓN

SUPERAR LAS TENTACIONES COMO JESÚS

Manuel Tenjo Cogollo

Email: manueltenjo@yahoo.com

Cada persona tiene su misión en el mundo y la va desarrollando en la medida en que toma conciencia de ella y se hace responsable de ella. Sin embargo, surge la duda en torno a estar en la misión correcta y desarrollarla de manera adecuada. Existe una tendencia a abandonar las empresas emprendidas por diversos motivos, a dejar de lado los esfuerzos y a añorar sus frutos, pero ¿a qué se debe?

Desde el comienzo de la humanidad, existe la tendencia por lo fácil y sin esfuerzo, por querer ser como un dios que todo lo conoce y todo lo puede, para ser admirado y reconocido, como se narra en el mito de la creación del mundo (Gn 2,9; 3,5). De igual manera, Jesús de Nazaret, al comienzo de su actividad, es tentado a asumir su mesianismo de manera fantástica y ostentosa para ser reconocido y admirado (como lo narra Mt 4,1-11), sin embargo, Él no cedió al tentador, sino que avanzó hasta cumplir su misión.

Así que veamos, cómo vencer las tentaciones de abandonar la empresa, al mismo tiempo que avanzamos en las herramientas para perseverar, hasta ver el cumplimiento de las metas y tener el éxito esperado.

1. Tentaciones para abandonar la empresa

Un gran líder como Jesús tuvo que enfrentar la tentación de abandonar su empresa del anuncio del Reinado de Dios y su labor mesiánica a favor del pueblo, por tres razones:

1.    la primera, quedarse con tener elementos materiales, ambicionar aumentar los bienes, dar paso a la avaricia, que es insaciables, pues entre más se tiene, más se desea. Así se le propone a Jesús un mesianismo externo y material de convertir piedras en panes, considerando que es la mejor manera de avanzar en la vida. Pero cuando no se tienen los recursos rápidos, entonces aparece el desánimo y el abandono.

2.    La segunda tentación está cargada de la búsqueda del reconocimiento por los signos y prodigios que se puedan realizar, porque Jesús tiene el título de hijo de Dios. Sin embargo, cuando se cede a la tentación del prestigio y el reconocimiento, termina volviéndose esclavo de los comentarios de los demás, produciendo fastidio, cansancio y abandono de la empresa.

3.    En tanto que la tercera tentación, enfocada en abrazar el poder sobre muchas personas, empresas o naciones, haciendo que el servicio al pueblo se convierta en política que se aprovecha para enriquecer, aumentar el poder, buscar más posesiones y alcanzar mayor prestigio. De manera que la tercera tentación complementa y engrandece las dos primeras.

Al final, todo termina en vacío, pues la cantidad de riquezas, popularidad y poder no llenan la vacuidad existencial, porque se aleja de la misión fundamental de la vida, que se gana, dándola, pues “hay más alegría en dar que en recibir”, como dice Jesucristo.

2. Herramientas para perseverar

La perseverancia se entiende tradicionalmente como mantenerse constante donde otros han abandonado. En el alcance y desarrollo de la misión en la vida, muchos emprenden negocios y proyectos, pero pocos los continúan hasta terminarlos y alcanzar las metas establecidas. Así que, es necesario establecer unas herramientas que ayuden a perseverar hasta ver las metas cumplidas y los sueños alcanzados.

1.    La primera herramienta que observamos en el Maestro de la perseverancia es que está llevado por el Espíritu al desierto (Mt 4,1). De manera que, se hace equipo de trabajo con la experiencia trascendente del Espíritu que impulsa desde dentro, que acompaña y da talentos, que fortalece y mantiene la mirada en la meta. Se necesita un valor superior, una meta tan trascendente que brinde la seguridad necesaria para perseverar y llegar a la meta final.

2.    La segunda, consiste en alimentarse adecuadamente, la mente, el espíritu y el cuerpo, para que el propósito inicial del Dios de la vida no se abandone, sino que se convierta en el nutriente permanente. Alimentarse del ánimo y las palabras adecuadas para crecer y perseverar.

3.    La tercera herramienta, es caminar con firmeza, sin entretenerse con los pequeños logros del camino o con las dificultades que aparecen. Evitar tentar la meta final, cambiar el objetivo definitivo o abandonar el propósito divino, a través de mantener en la mente lo más grande que se aspira.

4.    La cuarta, radica en evitar quedarse con los elogios de los pequeños logros, por medio de asumir con actitud de adorador, es decir, con humildad, para que los grandes éxitos no apabullen a quienes se esfuerzan por avanzar y para que sirvan de estímulo a las personas que están perseverando.

3. Llegar al éxito

Al final, el aprendizaje ha sido interesante, pues “el diablo le deja... se acercaron unos ángeles y le servían” (Mt 4,11). Señalando que se rescata el paraíso original, se vive el cielo en la tierra, se abre una experiencia paradisíaca, donde se disfruta lo alcanzado, no sólo para sí mismo, sino especialmente para compartir con otros, para fortalecer la dignidad personal y contribuir a la construcción de una mejor empresa y, por tanto, de una mejor sociedad.

La experiencia de Jesús, es también la de nosotros, la de aquellos que empiezan una labor empresarial o comunitaria, que enfrenta dificultades para avanzar, pero que, cuando persevera, alcanza metas sorprendentes y vive éxitos contagiosos.


 

jueves, 16 de febrero de 2023

13- RESPUESTAS NO VIOLENTAS

 RESPUESTAS NO VIOLENTAS

Manuel Tenjo Cogollo

Email: manueltenjo@yahoo.com

 Vivimos en circunstancias sociales tan complejas y contradicciones entre los valores y los principios tan enredadas, que es muy fácil responder con violencia, tener actitudes intolerantes y salir con acciones que engendran diversas formas de violencia. Ante una ofensa o una palabra fuerte, la respuesta inmediata es otra ofensa más grande y otras expresiones más hirientes, generando una cadena violenta muy difícil de controlar, donde las palabras de paz y tolerancia parecen avivar el fuego existente.

Ante esos fenómenos, permanentes en la historia y constante en diversas sociedades, Jesús ofrece una alternativa no violenta, unas respuestas pacificas ante las acciones violentas de otros (en Mt 5,38-40). La propuesta de Jesús fue acogida por Mahatma Gandhi para liberar a la India del colonialismo inglés; así como Martin Luther King Jr. ante la discriminación y segregación racial en los Estados Unidos de América. Por el mismo sendero siguió la propuesta de Mandela en Sudáfrica. Por citar solamente tres ejemplos. Así que nos puede servir a nosotros.  

1. Evitar la venganza

Las acciones vengadoras son controladas por la premisa de “ojo por ojo y diente por diente”, es decir, al que me la hace la paga y con intereses. Lo que produce más violencia por el deseo del desquite y de no quedar como débil ante las demás personas.

Sin embargo, Jesús propone que se debe recibir la violencia de la otra persona, pero no responder de la misma manera, con palabras como: “al que te abofetee en la mejilla derecha ofrécele también la otra”, así como saber qué reclamar y qué dejar pasar, evitando daños mayores, como: al que quiera pleitear contigo para quitarte la túnica déjale también el manto”; hasta llegar a expresiones de trabajo y mayor esfuerzo en las labores a las que una persona se puede ver obligada, diciendo: “al que te obligue a andar una milla vete con él dos” (Mt 5,38-41.

Parece complejo recibir las acciones violentas, pero no devolverlas, hasta parece que es propio de personas débiles o cobardes. Las personas que optan por contribuir a una sociedad mejor con respuestas no violentas, que evitan la venganza y responden con bondad, tienen una fortaleza interior muy grande, no aceptan sentimientos bajos como el rencor en su vida, porque su espíritu trasciende más allá de las agresiones, pues controla su bestia interior para no dejarla aflorar.

Además, las personas que evitan la venganza, descubren que quien obra violentamente va contra su propia naturaleza a causas de vivir con una violencia interior muy fuerte y originada en algún momento de su vida. Es decir, la persona que responde con violencia es porque ha sido tratada de igual manera y porque ella lo gobierna para agredir a sus semejantes. Sin embargo, cuando la persona se conquista a sí misma, aprende a controlar su violencia interior, ha domado su bestia interna, entonces responde con paz, ayuda a otros, es tolerante y la conduce a vivir con generosidad, como enseña Jesús a sus discípulos: “A quien te pida da, y al que desee que le prestes algo no le vuelvas la espalda”.

2. Amar a los enemigos

El segundo elemento de la propuesta de Jesús es complejo, pues va más allá de la dominación de sí mismo y de domar la bestia interior, ya que exige de se debe amar a los agresores, orar por los perseguidores, tratarlos como hermanos y saludarlos con cordialidad (Mt 5,43-48). Lo que muestra que la persona agredida debe darle valor y estar a favor del agresor, para que él progrese. ¡Caramba, eso requiere muchísima fuerza interior!

El planteamiento está encaminado a asumir los mejores valores y principios, con una fuerza interior tan grande que hace a la persona parecida al Padre creador, como dice Jesús: “ustedes sean perfectos como es perfecto su Padre Celestial”. Eso muestra que se debe amar y favorecer no solo a quienes hacen el bien, sino especialmente a los que dañan, calumnian y destruyen, para ayudarles a su liberación interior.

3. Conclusión

En conclusión, la actividad no violenta es para personas que tienen fuerza interior, que aman y escogen valores superiores en lugar de odiar, buscar la venganza y destruir a otros. La opción por la no violencia es para personas valientes que han conquistado sus miedos y que tienen tal fortaleza que reciben la violencia de otros, pero responden con amor y buscando restaurar las relaciones humanas. Fuerza creadora con acciones dinamizadoras de una sociedad nueva, donde la solidaridad y la justicia traen como fruto la paz.

miércoles, 8 de febrero de 2023

12- LOS PROBLEMAS COMIENZAN SIENDO PEQUEÑOS

 LOS PROBLEMAS COMIENZAN SIENDO PEQUEÑOS

Manuel Tenjo Cogollo

Email: manueltenjo@yahoo.com

Muchas personas manifiestan que tienen grandes problemas y que no saben cómo solucionarlos, sin embargo, tal vez no quieren recordar que comenzaron siendo pequeños, por dificultades al tomar decisiones adecuadas y oportunas. Todo lo grande comienza siendo pequeño, así como todo lo difícil comienza siendo fácil, según hemos aprendido.

El más grande maestro de la humanidad: Jesucristo enseño a sus discípulos un estilo de vida (en Mt 5,17-37), donde deben medirse las consecuencias de las decisiones para frenar o corregir las situaciones complejas a tiempo. Veamos algunos ejemplos.

1. Controlar el enojo

Jesús enseña que antes de llegar a matar a una persona cercana, como un hermano, es necesario controlar el enojo (Mt 5,21-26). Lo que hace que tu te enojes es que los demás no se portan como tu, no responde a tu programación y no cumple con tus expectativas. Así que la causa del enojo no está en la otra persona sino en ti.

El enojo puede generar una cantidad de desgracias, pues después sigue insultar a la otra persona con palabras más gruesas y de mayor calibre: “imbécil, renegado, estúpido”, hasta llegar a la violencia física y a causar desgracias muy difíciles de reparar.

De manera que, la clave es tomar control de las emociones como el enojo, fortalecer el interior para no obrar por venganza, sino ofrecer el perdón y la reconciliación, como si fuera una ofrenda a la divinidad. Es mejor, ante la ofensa y la perdida de expectativas, promover ambientes de perdón, donde se quitan cargas dolorosas, y la reconciliación, donde se restaura la comunión como antes de la ofensa, ganando a la persona para vivir como hermanos.

Si frenas el enojo, frenas la lengua, no realizas ataques emocionales o morales, tampoco aplicas la violencia física, al contrario, promoverás ambientes de perdón y reconciliación, que producen paz y buenos ambientes laborales y familiares, donde da gusto llegar.

2. Controlar los deseos del corazón

El Maestro enseña que, si los malos deseos del corazón dominan la mirada y las acciones, los daños que causan se van agrandando muchísimo, como el caso de establecer relaciones amorosas con mujeres casadas (en Mt 5,27-30). El planteamiento comienza con mirar a una mujer deseándola, por allí pasa al corazón para tomar decisiones existenciales y termina con acciones que pueden dañar hogares, empresas y buenas amistades.

Es necesario frenar el problema desde la mirada, es decir, controlar la mirada, controlar los deseos del corazón y controlar las acciones de las manos, pues, si se les da rienda suelta, pueden ocasionar problemas muy grandes, complicados y de difícil manejo, pues se mezclan con violencia, chantaje, manejos económicos y sociales.

Si controlas tus emociones y tus decisiones, si tomas la rienda de tu vida y miras las consecuencias de lo que puedes llegar a hacer, entonces, empezarás a construir ambienes agradables de fraternidad, apoyo y promoción humana. Se trata de respetar la dignidad de cada persona, promover lo mejor que tiene, ayudar a crecer integralmente, generando ambientes de paz, buen clima laboral y unas familias donde se promueve el respeto a lo que es ajeno y pertenece a otras personas.

3. Controlar las palabras

Otro aspecto que causa grandes problemas es el mal manejo de las palabras, las promesas no cumplidas y la pérdida del carácter cuando se empeña la palbra. Jesús enseña a sus discípulos que no deben jurar ni firmar sus promesas por Dios, por la tierra, por el cielo o por lo que más se ama, pues eso muestra que la seguridad de su vida la está poniendo en seres externos o en personas cambiantes y poco sólidas.

Cuando se realizan promesas y no se cumplen, se pierde a credibilidad, empieza a fallar la autoridad, no se cumplen las metas y genera ambientes inestables. Los daños son terribles porque la falta de confianza en las personas o las instituciones, la inseguridad que se genera y las pocas proyecciones, van a causar ambientes de desconfianza, violencia de distinto estilo, faltas de compromiso para alcanzar metas y pocos esfuerzos por perseverar y tener éxito.

Si controlas tus palabras y las utilizas con firmeza, se brindará seguridad en quienes te rodeas, porque sabrás que cuando tu dices si es si y cuando dices no es no. Lo demás no es necesario, porque tu vida es tan firme que los demás creen y confían en tus palabras.

De manera que, lo que siembras eso cosecharás (según la agricultura), toda acción tiene su reacción (según la física), es un principio de la naturaleza que siempre se cumplirá. Te cuidado con tus deseos y decisiones, con tus palabras y tus acciones, pues puedes generar problemas muy grandes y con decisiones complicadas que debes tomar para solucionarlas. Mide las consecuencias antes de tomas decisiones.



jueves, 2 de febrero de 2023

11- DAR SABOR E ILUMINAR A LA VIDA

 DAR SABOR E ILUMINAR A LA VIDA

Manuel Tenjo Cogollo

Email: manueltenjo@yahoo.com

 La tendencia general consiste en buscar resultados y metas finales descuidando los principios, que se encuentran al comienzo de las actividades que se van a emprender. Los principios son universales y se aplican como leyes de la naturaleza. Así que, Jesús enseña a sus discípulos y futuros apóstoles, dos principios que, aplicados adecuadamente, produce resultados sorprendentes: dar sabor a todo con un compromiso radical e iluminar todos los ambientes donde se la persona se encuentre.

1. Dar sabor a lo que se hace

Jesús enseña a sus discípulos que son: "la sal de la tierra" (Mt 5,13), mostrando que ya está en su escencia la capacidad de dar sabor a la tierra. La sal sirve para dar gusto, como condimento (en su sentido natural) y, por tanto, da sabor a las comidas, conserva los alimentos. En la cultura judía la sal era un elemento de purificación (2 Rey 2,19-21); era también un elemento fundamental del culto a Yahveh (Lev 2,13), y llego a expresar la alianza entre Dios y el pueblo (Núm 18,19). Si los discípulos son “la sal de la tierra” es porque tienen que realizar en sus vidas estos sentidos de la sal natural. Han de encontrarle gusto profundo a la vida y ayudárselo a descubrir a los demás; ser un elemento purificador en el ambiente donde viven; hacer de su vida y de todo el mundo una alabanza al Señor; han de ser testigos permanentes de la Alianza nueva de Dios Padre con el nuevo pueblo de Dios. Además, la sal nunca es para así misma sino para la comida.

La sociedad actual necesita personas que estén dispuestas a dar sabor a todo lo que realizan, con un poco de humildad, pues si está muy salado nadie se lo come y se está insípido es dejado de lado. Es necesario brindar ambientes agradables de trabajo, productivos y dinamizadores, donde exista una armonía entre los seres humanos y resplandezca la justicia social que produce como fruto la paz.

Ayudar a que otros descubran el sabor de su vida es una labor interesante, porque más personas empiezan a aportar la parte agradable de su ser, conduciendo a que la sociedad avance en la promoción de la dignidad humana.

2. Iluminar los ambientes donde se encuentra

Al mismo tiempo, Jesús dice a sus discípulos que ellos son "la luz del mundo" (Mt 5,14), para iluminar todos los lugares y las vidas donde se encuentre. La luz es otro título de Jesús para referirse a los discípulos. El mundo es asemejado a la “casa” (Mt 5,15) y en una casa de la sólo había una habitación para los moradores de ella. Ahora bien, en Mt 4,16 Jesús es presentado como la luz que brilla en las tinieblas y aporta novedad total donde reina la oscuridad y la muerte. Existe, entonces, una continuidad de la misión de Jesús. En el mundo los hombres han de ver las obras de los discípulos de Jesús, las exigen como una necesidad, y esas obras, realizadas en medio de la oscuridad, brillan, aportan luz a los hombres, pero glorifican también al Padre.

La luz ilumina en momentos de oscuridad y allí se valora su utilidad, sin embargo, demasiada luz encandelilla y poca luz desespera. Iluminar donde todo resplandece, es una pérdida de esfuerzo. De manera que cuando las personas iluminan ambientes de oscuridad, son bien recibidas y valoradas, porque surge la esperanza de un nuevo amaneces.

Cada ser humano tiene dentro la luz de su Creador, para que, con sus acciones, haga resplandecer las maravillas divinas y se convierta en canal de bendición para otros. En los momentos de oscuridad social que estamos viviendo, necesitamos muchas luces que con sus buenas acciones hagan cesar la horrible noche e iluminen la mayor oscuridad para que todo resplandezca.

3. Conclusión

Los que optan por tener a Dios como único Rey hacen que su vida sea sal y luz que glorifica al Padre y lleva acciones de justicia a los hombres, es decir, aportan sabor y luz a la humanidad al mismo tiempo que alaban al Padre.

Es tiempo en que tu asumas tu misión responsablemente, brindar un sabor y agradable luz en todos los lugares donde te encuentres y con todas las personas con las que te relacionas, para tener una sociedad donde resplandezca la justicia y la paz, donde la solidaridad y la promoción humana hacen parte de los que viven haciendo la misericordia y mostrando que el ser humano ha sido creado para realizar grandes hazañas.